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Bukele y López Obrador

Entre el presidente de El Salvador, el populista Nayib Bukele, y el presidente de México, el populista Andrés Manuel López Obrador, hay muchas semejanzas

Entre el presidente de El Salvador, el populista Nayib Bukele, y el presidente de México, el populista Andrés Manuel López Obrador, hay muchas semejanzas.

Su estilo de comunicación es el mismo y también coinciden en la idea de que todo el poder se concentre en el Ejecutivo y que a este se le sometan los otros poderes del Estado.

En las pasadas elecciones el partido de Bukele se hizo de la mayoría absoluta en la Asamblea Legislativa, como la tiene López Obrador en el Congreso mexicano.

El sábado pasado, al instalarse la nueva legislatura, la primera decisión de los diputados de Nuevas Ideas, el partido fundado por Bukele, fue destituir a los magistrados titulares y suplentes de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia.

Esto como represalia por las acusaciones que Bukele hizo a los magistrados por haberle frenado decretos presidenciales relacionados con la gestión de la pandemia.

En el caso de México la mayoría de Morena en el Congreso votó un artículo, para prolongar el mandato del presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por dos años más en una clara violación de la Constitución.

El argumento es que así se podrá concluir la reforma del Poder Judicial iniciada bajo la presidencia del magistrado Arturo Zaldívar que no ha condenado la violación y espera la resolución de la SCJN.

En el caso de El Salvador y México los congresos actuaron así por orden de sus presidentes y en las dos votaciones hubo irregularidades y no se siguieron los trámites habituales. Las dos bancadas se impusieron sea como sea.

Bukele en Twitter, que es su mañanera, argumentó que “la destitución de los magistrados de la Sala de lo Constitucional por parte de la Asamblea es una facultad incontrovertible expresada claramente el artículo 186 de la Constitución de la República”.

El artículo dice eso pero añade que “por causas específicas, previamente establecidas por la ley” y es a todas luces evidente que en esta ocasión las motivaciones no son de carácter legal sino político.

Bukele como López Obrador por tener la mayoría en el Poder Legislativo impulsan leyes sin tener que negociar con las otras fuerzas políticas. Se vota lo que ellos quieren.

Los dos a través de esa mayoría se han propuesto deshacerse de los mecanismos y organismos del Estado que han sido diseñados, para actuar como contrapeso al Poder Ejecutivo como lo señala la Constitución de ambos países.

El salvadoreño en Twitter elogió la acción de los diputados que votaron lo que quería: “Diputados valientes, trabajando y cumpliendo el mandato popular. ¡Dios y el pueblo con ustedes!”. López Obrador lo hace en su comparecencia mañanera.

La actuación de Bukele y de López Obrador con relación a sus decisiones que afectan al Poder Judicial han recibido la crítica de organismos internacionales. Se les acusa de violar la Constitución y el Estado de Derecho. En eso también se parecen.

Rubén Aguilar Valenzuela

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