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El Imparcial / Tijuana / Ruffo Ibarra

Paseo de la fama: Le da sabor a todo lo que hace

Ruffo Ibarra es un chef y empresario que ha puesto en alto el nombre de Tijuana, no sólo por ser precursor del concepto CaliBaja, si no por su vocación de servir.

Tijuana BC.- Nunca sabes hasta dónde te puede llevar la curiosidad, en el caso de Ruffo Ibarra, primero lo llevó a la cocina y luego a encontrar su verdadera vocación: El servir.

Hoy, es dueño de Oryx su propio restaurante, es creador de conceptos, líder de su generación de chefs y de la comida CaliBaja, además ya forma parte del Paseo de la Fama de Tijuana Innovadora. Ayer, sólo era un intruso en la cocina de mamá.

“Comencé a lado de mi mamá en la cocina en casa, desde los 5-6 años estaba de metiche, ya para los 8 lo poco que sabía hacer: pancakes, huevitos”, recordó.

Porte relajado

Lo más sorprendente de Ruffo no es el status que se ha ganado a pulso, con mucho trabajo y creatividad dentro de la gastronomía de la región, lo más sorprendente es su porte relajado, fresco, su amabilidad y ganas de compartir.

Eso es algo que demostró cuando dio su charla TEDx “El Sabor de la Vida”, donde invitó, mediante ejemplos de cómo se organiza un menú, a hacer una autorreflexión y balance para vivir con plenitud cada etapa de la vida.

Y es así mismo, por etapas como describe su evolución a lo largo de los años. De ser egresado de la primera generación de Culinary Art School, pasó a ser aprendiz en la cocina del Grand Hotel y luego a estancias para aprender sobre los procesos de restaurantes en San Diego, España y otras partes del mundo, hasta recolectar las experiencias necesarias para abrir su restaurante.

“Aprendí un poco de todo de la vida dentro de una cocina”, comentó durante el video con el que se hizo oficial su ingreso al Paseo de la Fama de Tijuana Innovadora.

Madurez y motivación

Siente que esa mención lo tomó en un momento de mucha madurez y lo carga de motivación para seguir trazando ese camino tan especial: “Te empujan, es como una deuda de por vida. Me dedico al servicio, la cocina es una parte, es una herramienta para servir, pero no es la única forma de servir”, puntualizó.

Ha sido reconocido como uno de los mejores empresarios del Noreste de México: “Es algo que hay que aprender y muchas veces no estudiamos y nos vamos capacitando en el camino. También es algo de lo que estoy agradecido, Oryx es una empresa familiar”, enfatizó.

Ha tenido la oportunidad de cocinar en eventos para el canciller Marcelo Ebrad o la famosa Kim Kardashian, aprender de Massimo Bottura y Javier Plascencia en sus restaurantes, así como ser la imagen los relojes IWC Schaffhausen en México, ser el capitán del equipo mexicano en el BocuseD’or y que su historia sea llevada en un Cortometraje al Festival de Cine de Cannes.

Impregnado de técnica y cultura

“Te empapas de otras culturas, de otras técnicas, te impregnas de todo lo que está pasando a tu alrededor, yo siempre me he considerado como un niño chiquito, juguetón y sobre todo porque me gusta asombrarme y tener los ojos bien abiertos”, explicó.

¿Lo más importante de todo? El servir – y no precisamente platillo- es servir, de servicio. Forma parte de una fundación llamada This Is About Humanity que busca brindar ayuda a los más necesitados en ambos lados de la frontera.

“Con la locura que es la cocina, cuando me toca salir de viaje, cuando apoyamos en una fundación, cualquier evento donde esté cocinando desinteresadamente es como terapia”, confesó.

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